Feria ecológica vs Concurso de Ganado Selecto, 2018
La semana pasada tuvimos la oportunidad de visitar la Granja Experimental de Arucas con motivo de la Feria Ecológica, un evento que nos llenó de esperanza. Fue un día para celebrar el compromiso con el medio ambiente, donde disfrutamos de numerosos stands que ofrecían productos veganos, sostenibles y respetuosos con el planeta y todos sus habitantes. Un encuentro inspirador, que parecía marcar el rumbo hacia una isla más consciente, más ética, más coherente.
Sin embargo, hoy nos encontramos con una realidad que nos deja perplejas: la misma Granja Experimental del Cabildo de Gran Canaria acogerá, los días 26 y 27 de mayo, un concurso de ganado selecto. Un evento donde se fomentarán las razas autóctonas y se exaltarán tradiciones como las trasquiladas, la doma equina, la trilla, el arrastre y el salto del pastor… todo ello envuelto en música folclórica y estética festiva.
Y no podemos evitar preguntarnos:
Señor Cabildo, ¿Dónde está el compromiso con los animales, con la sostenibilidad real, con la coherencia ética?
¿De qué sirve presumir de una “isla ecológica” si en el mismo espacio se celebran prácticas que implican explotación y dominación animal?
Trasquilar, domar, arrastrar... son actos de esclavitud disfrazados de cultura. Tradiciones que perpetúan una relación desigual con los animales no humanos, reduciéndolos a herramientas de trabajo, a objetos para el entretenimiento, en lugar de reconocerlos como seres sintientes, con intereses propios y derecho a vivir libres de explotación.
Que un mismo lugar acoja en tan poco tiempo eventos tan opuestos no es casualidad. Es reflejo de una incoherencia estructural, de una falta de voluntad política por avanzar hacia una isla verdaderamente ética y respetuosa.
A esto lo llamamos hipocresía.
Y no lo vamos a normalizar.
Desde Voces Animalistas alzamos la voz una vez más por quienes no pueden hacerlo. Por cada animal que será utilizado, exhibido y forzado a participar en este tipo de espectáculos, pedimos coherencia. Pedimos justicia. Pedimos un cambio real. Porque sin respeto hacia los animales, no hay verdadera sostenibilidad.
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